Plaza de Toros

Plaza de Toros
Este año, 2014, me ha tocado a mí... Tendré el gran orgullo y a la vez, la gran responsabilidad de representar a la mujer rondeña, un sueño hecho realidad y todo un año para disfrutarlo.

Desde éste blog os iré contando a modo de diario, lo que supone éste nombramiento, pero no sólo yo, como Presidenta, también "mis niñas" aportarán cada una su granito de arena para que conozcáis de primera mano nuestras ilusiones, los preparativos, las inquietudes, lo que significa cada acto al que acudimos, los complementos y trajes que vamos a llevar, en definitiva, lo que significa ser Dama Goyesca de la Feria y Fiestas de Pedro Romero.

Espero que a través de mis palabras logre transmitiros nuestros sentimientos y podáis vivir con la misma ilusión que nosotras este sueño.

Belén
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martes, 26 de agosto de 2014

La fiesta de la Presi...

Llegó el 22 de Agosto, el día de mi fiesta...

 
 
Otro día de correr y correr desde por la mañana, quería que todo estuviera perfecto para recibir a los invitados a las diez de la noche.
 
Ese día si que estaba nerviosa, aquí no había organizado nada la Delegación de Fiestas del Ayuntamiento, ni Presidencia, ni Protocolo, en esto estaba yo sola y la responsabilidad de que todo saliera bien era únicamente mía, aunque debo decir que me estuvieron pendiente en todo momento por si necesitaba algo, al igual que Gabriel Pardo, Presidente de la Asociación de Peñas.
 
Cómo digo fue un día de carreras, a las siete de la tarde llegué al Convento Santo Domingo con el moño hecho y la tiara colocada, directa de la peluquería, quería ver como había quedado todo antes de que llegara la hora y, ¡menuda sorpresa!, me encontré el salón ya preparado, mantoncillos colgados de las ventanas interiores, "mi burladero" colocado al final de la alfombra roja, velas y flores en las mesas, el equipo de música y el de "Albero" preparado para cuando llegara la hora del baile. Todo perfecto gracias a Moli y a Paco. Ya solo quedaba irme a casa y colocarme el vestido que Javier Jiménez me había diseñado con tanto mimo.
 
A las nueve y media volví ya estaba de vuelta, nerviosa, ilusionada y un poco preocupada con muchas preguntas en la cabeza... ¿Saldrá todo bien? ¿Estarán a gusto los invitados? ¿Será una noche como tantas y tantas veces había imaginado?...
 
No voy a contar mucho de como transcurrió la noche, solo que me lo pasé genial, disfruté compartiendo charlas y risas con todos los invitados, me emocioné, bailé lo que hacía tiempo que no bailaba y creo que salió todo como quería que saliera, y nada más, las fotos que os voy a poner lo dicen todo...
 
Solo voy a añadir algo, mi padre me enseñó que es de bien nacido ser agradecido, así que...
 
Mil gracias a mi familia, a mis amigos, a los que se hicieron muchos kilómetros para estar conmigo ese día, a los que siempre están a mi lado, a los que no pusieron estar pero me llamaron y me enviaron mensajes, a mis diez niñas, a sus padres, gracias por vuestros regalos, tened por seguro que me veréis lucirlos en más de una ocasión. A Bea, María y Antonio, tres de mis niños que sé que disfrutaron muchísimo.

A los representantes del Ayuntamiento, gracias por estar allí, por animarme y por apoyarme desde el día que me disteis la responsabilidad de ser Presidenta de las Damas Goyescas y por el precioso regalo que me hicisteis, ¡me encantó! Gracias a Mari Paz por tus palabras.
 
Al personal del Convento de Santo Domingo su disposición total para todo, lo que necesitaba, allí estaban para solucionarlo de una forma o de otra. También agradecerle a la Real Maestranza de Caballería de Ronda que me prestara ese burladero que yo quería tener en mi fiesta, ¡me hizo una ilusión tremenda!

Al Catering Santa Brígida, que se volcaron para que todo saliera a la perfección y como yo deseaba. Al Grupo Albero por animarnos la noche.
 
A la Policía Local, a la Policía Nacional, (en especial a sus jefes),  a María y a Pablo, gracias por hacerme la mañana, pese a todo, más fácil, por la tranquilidad que me han dado y por como se portaron conmigo. Ellos saben el porqué de mis palabras, no hay que decir más...

En fin, gracias a todos los que me acompañasteis ese día, y si la fiesta salió bien no fue por mí, fue merito de todos y cada uno de los que estabais allí. Mil gracias
 








 
 
 
 
 

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